YO...YO...YO...

arrojado dentro de mi mismo
prisionero de mi mismo
no oigo más que mi voz
no veo a nadie más que a mi mismo
y detrás de mi, no hay más que sufrimientos

quisiera librarme de mi cuerpo
que no es más que hambre
y todo cuanto toca
con sus grandes e incontables ojos,
con sus mil manos tendidas,
no es más que para asirse
e intentar aplacar sus insaciable apetito

quisiera librarme de mi corazón
que está todo henchido de amor aún
pero cuando pienso
que amo locamente
y lleno de coraje, entre veo
que es a mí a quién amo
a través de otro

quisiera librarme de mi espíritu
que está lleno de sí mismo
de sus ideas, de sus juicios
y no sabe dialogar porque no escucha
más palabras que las suyas

por eso cuando estoy solo, me aburro
hace mucho tiempo que estoy así
todo me parece ruin, feo y sin luz
y es porque no puedo ver nada
sino a través de mi mismo,
me siento dispuesto a dialogar
con todo el mundo
pero para que, si no puedo amarlos

quisiera salir, quisiera escapar
sé que la alegría existe
la veo cantando en las caras,
sé que la luz brilla
la veo iluminando las miradas
pero...no puedo salir,
le tengo cariño a mi prisión
y me siento mal, nadie lo sabe
porque nadie jamás ha entrado en mí
por ello me hallo solo
más a pesar de todo, guardo la esperanza
de que algún día encontraré por fin
el camino de la luz y la alegría